Tras ver a Denzel Washington que para mí ocupa la segunda posición y Will Smith el tercero en el podio, toca hacer la entrada a mi actor favorito de todos los tiempos, independientemente del color de la piel: Morgan Freeman.
No sé si será casualidad o no pero cuando tengo que
hacer un top con los largometrajes que más me han gustado, siempre salen dos
muy claras: "Se7en" (1995),
de la cual hice un post hace menos de un año
y "Cadena perpetua" (1994). En ambos films hace rol de actor principal, sin embargo se centran en la vida del otro protagonista y, pese a ello, se nos hace más presente Freeman en la película dando su punto de vista sobre lo que está sucediendo en pantalla, que el propio actor en el que realmente se centra la obra o al menos, si no estáis de acuerdo con esta opinión, ensalza de gran manera a su compañero de reparto su propio papel.
Morgan es un tipo serio e inteligente en sus papeles en el cine, alguien con una voz espectacular al que, cada vez que dice una frase, tanto a sus compañeros de trama como al espectador tienden a grabársela porque saben que por alguna razón suelta eso o al menos nos va a dar que pensar con ello en la vida real.
También está la cuestión que me encantan las películas de detectives, esos thrillers psicológicos que no sabes muy bien ni quien es el malo, ni como le pueden dar caza y en ese tipo de films, él como inspector lo borda. Quizás Denzel Washington también, pero la diferencia entre ellos es que parece que Denzel impone o acojona cuando dice algo y a Freeman se le ve como el hombre sabio que prefiere pasar desapercibido y lo suelta como si nada.
Will Smith es puro taquillazos y versatilidad, Washington es películas de acción y el tipo duro y sabio a la vez, pero Morgan Freeman tiene ese punto que, si a todas las películas les quitaras su papel de la ecuación, fuera principal o secundario en ellas, quedarían cojas.
Yo le descubrí con "Se7en", años después del estreno cuando nos la pusieron por partes en el autobús de vuelta de la Universidad. Es una película que me había negado siempre a ver porque de alguna manera siento aberración por las películas de miedo o con atmósferas desagradables y al ir en el autobús me la tuve que tragar como si fuera una mini serie durante varios días y curiosamente me marcó de tal forma que se convirtió en mi preferida y no por Brad Pitt o el mal rollero final, sino por la forma de dejar pistas de John Doe y la actuación de un maduro policía que quiere retirarse porque odia su trabajo y se encuentra con un caso que le intriga y en el que se da cuenta que un novato no va a poder solucionar.
Después me enteré que a Freeman le ficharon para hacer varias películas en las que hacía un papel similar y te das cuenta que sin él en la pantalla, no pasarían de ser films sin pena ni gloria con un buen argumento detrás.
Pero es que Morgan Freeman en "Cadena Perpetua" es un preso que por el color de su piel nunca saldrá de la cárcel y desde ese punto de vista nos narra la historia de otro preso que fue condenado injustamente por un delito que no cometió sufriendo como nadie en ese penal, también es un secundario en el "Robin Hood" de 1991 que le roba cierto protagonismo al mismísimo Kevin Costner en su mejor momento, o simplemente es el diseñador de los complementos del superhéroe en la trilogía de Batman de Nolan y su sola presencia en pequeñas dosis hace que las propias pelis se engrandezcan incluso más de lo que fueron. Hasta le hemos visto levantando comedias como las dos de "Como Dios", haciendo del Todopoderoso cambiando la vida de Jim Carrey y de Steve Carrell, consiguiendo que ambas comedias no parezcan sendos bodrios en la carrera de ambos. Este tipo de cosas son las que me hacen verle como el mejor actor, querer que haya un silencio total en la película porque va a decir algo Morgan Freeman y sabes que puede ser importante o para el argumento o para tu vida y el tipo aparece por allí con una actitud como si acabase de pasar un extra que tenía algo que soltar.
Comencemos.
