Hace poco leí un artículo en el que relacionaban distintas enfermedades mentales con los personajes de animación de Winnie The Pooh y me pareció simplemente fascinante y a su vez significativo que sus autores moldearan a sus personajes con estas cualidades.
No os voy a engañar, conozco al osito pero no sus historias y de que pie cojean sus amigos, pero me quedé con la intriga de si hay más personajes en los dibujos animados que nos quieren decir algo: Integrar a las personas especiales a nuestra sociedad, demostrándonos que pese a sus cualidades específicas puedes llegar a empatizar con ellos o simplemente no darte cuenta de lo que les sucede, viéndolo todo con una peculiaridad más.
Como todo en este blog, las entradas no quiero que sean un “copia y pega” de otros artículos, me gusta ir mucho más allá e investigar introduciendo pequeños detalles que se ha dejado la gente en el tintero y que podáis leer más cosas que lo que hayáis leído ya, en una entrada que me atañe particularmente en este mes de Julio y que, de alguna forma, debía homenajear dando una vuelta de tuerca a esta increíble revelación.
Según la clasificación, existen 18 tipos de enfermedades mentales, obviamente puede que haya más, pero ese tipo de casos difícilmente se pueden catalogar. La mayoría de las personas, por no decir todo el mundo, seguramente hemos padecido o padecemos alguno en mayor o menor medida, luego deberíamos estar concienciados y respetar/ayudar a los que peor lo pasan, en vez de mirarlos como “bichos raros”, separarlos de nuestro entorno e incluso burlarnos de ellos, por eso en la mayoría de los casos se introdujeron estos dibujos...