SOBRE LA ESPINA CLAVADA

Desde hace unos meses tengo una espina clavada, del tipo que, si la hurgas, en vez de sacarla la introduces más, agravando la herida. He intentado de mil maneras no concentrarme en ello, pero quieras o no esta ahí, y si no la quitas te terminará causando serios problemas.


No soy de los típicos que se hundan con los problemas, quizás si los medite mucho y seguramente mi forma de ser pueda engrandecer o empequeñecer de forma espectacular un problema según mi actual estado de ánimo en ese momento. En este caso lo he intentado arreglar cuando mejor he estado e incluso cuando peor y las consecuencias han sido parecidas con lo cual, de alguna forma, me siento bastante desalentado conmigo mismo para continuar esta situación. Cada uno conoce sus límites y me está viniendo bastante grande, es dificil solucionarlo cuando el problema a veces es en primera y otras en tercera persona. Sólo se que si no lo paro o corto de raíz el problema va a poder conmigo y no veo justo que un problema así, acabe por hacerme perder tanto los nervios, como el cerebro y mas si cabe el corazón. Mi naturaleza, dentro de la negatividad que me acompaña, es constructiva, siempre busco como acabar con las cosas que pueden conmigo, malo es cuando me da por arrojar la toalla, despues de haberlo intentado de mil formas diferentes y ver que el problema es de índole similar a cuando empezo y mas si cabe, si te hace recordar los restantes problemas que abarca tu vida. Ahora me ha dado por ignorar esa espina, pero tratándose de mi intentar ignorar un problema, sinceramente es incompatible