Me he dado cuenta que mis estados de subidas y bajadas suelen ir precedidos de pequeños detalles que me hacen cambiar las perspectivas de las cosas. Tan sumamente variable que lo que es inapreciable en el comportamiento de otro ser humano a mí me puede hacer ascender o decrecer el ego con demasiada facilidad.
Me da incluso miedo pensar que un detalle puede cambiar tanto mi forma de sentir, apreciar o variar en un momento concreto. Las personas nos movemos por impulsos, generalmente producidos por golpes, ya sean de suerte o duros al mentón, pero sin dudas todos los cambios se producen a través de un golpe que ha producido ese chispazo o reacción.
Eso sería mi tranquilidad, cambiar a base de responder a una evolución no prevista causada por un golpe, pero no, lo mío se está convirtiendo en algo tan sutil que lo que hoy es negro mañana es blanco o viceversa por un detalle de alguien que ni siquiera se imagina que ha desencadenado el cómo me encuentro en ese momento. Lo único que en verdad saco de positivo de una cosa así ha sido que no cualquier persona puede producir esos cambios tan significativos, generalmente ese selecto grupo a lo sumo es de 3 o 4 personas, las cuales aprecio en demasía.
Pero a su vez me siento a veces demasiado vulnerable, tanto, que no me reconozco… quieras o no, mi personalidad se basa en una especie de “cuanto más mierda me eches encima, mas me creceré” y en los últimos años no me he reconocido, salvo que hagan daño a alguno de los míos, en esa situación. Por el contrario me reconozco muchas veces por lo que para bien o para mal pueden sacar de mi actitudes egoístas, déspotas o sencillamente demasiado sensibles. Hecho que por otro lado me da demasiado vértigo, porque para bien o para mal la montaña rusa, a menos que te la conozcas de memoria, no sabes cuando terminas de bajar o cuando empiezas otra vez a subir. Mientras todo esto ocurre, tengo que aprovechar el último detalle, ese que ha hecho que mis últimos dos días me sienta feliz y no triste.
ohh
ResponderEliminarpues es cierto todo lo que pusiste, un pequeñísimo detalle nos hace estar e una u otra forma.
lo que hay que conseguir es que los detalles que nos provocan estar de bajón echarlos fuera y quedarnos soo con los detalles que nos provocan satisfacción.
un saludito raude
La vida se forja con esos pequeños detalles, ya sean buenos o malos, claro. El truco es en aprovechar al máximo y exprimir esos pequeños buenos detalles y en intentar darles la vuelta y ver el lado positivo de los pequeños malos detalles. De todo se puede sacar partido. La cosa está en que de una forma u otra, la vida te cambia, y ya sea para bien o para mal, es una buena señal.
ResponderEliminarXe, xiquet, a veces pareces un diccionario de frases, ja, ja, ja. Me encanta.
ResponderEliminarA mí me pasa como a ti, y sí, me derrumbo con una tontería, pero luego pasa algo bonito y lo exagero tanto dentro de mí que me convierto en felicidad, no en sentirla, sino serla. Y eso me gusta. Así que disfrútalo al máximo, ^^!
Por orden:
ResponderEliminar- Ori: la verdad que he pretendido hacer una critica, que no podemos permitirnos el lujo que nuestra vida cambie excesivamente por pequeñas cosas,si no,preparate a ser una bomba de relojeria todos los dias.
- Esther: La idea que planteas es la idilica, ojala se pudiera hacer como dices,pero como he puesto en el texto,esos detalles solo dependen de 3 o 4 personas a lo maximo, y si quieres tanto a esa gente, los malos detalles son muy dificiles de dar la vuelta.
- Laura: ati si que solo te puedo decir, sigue tu propio consejo, te vendra muy bien, acentua los buenos detalles, y no le des tanta importancia a los malos.
y es en este punto q viene a mi mente tu cuento de Jorge Bucay.. sí, ese del anillo con el mensaje secreto... y pues... me quedo con el momento de euforia jojojo
ResponderEliminarpor cierto... para esto, tan fácil como usar un traje de foca en el q todo resbale y tener un cubo para recoger los detalles importantes... para bien o para mal, que de los malos se aprende más aunq nos gusten más los buenos XDDDDDDDDDDD
en fin, besazoooooooooooooooos gooooooorrrrdos gorrrrrrrrdos
Aleeeeeee, feliz año guapetona. Si se aprende de todo pero los bueno apenas te hacen reflexinar y los malos durante mucho tiempo
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