Esto va en respuesta a un comentario que me han hecho en el facebook, que suele pasar por mi cabeza y porque me ronronea con continuidad. Pues bueno, atendiendo al escrito anterior de mayonesa y café, yo concibo la vida como un sistema planetario que gira alrededor del núcleo que es el sol. En este caso debería ser el individuo el sol y las cosas de la vida los planetas siendo Mercurio las más importantes e imprescindibles para que el sol luzca y Plutón las que forman parte de tu vida pero son francamente prescindibles.
La órbita en estos casos no es elíptica y el orden de los planetas, tampoco y aunque queramos enumerarlos del más cercano al más lejano, no podemos. Quizás nuestro Mercurio no varíe nunca, pero si quizás Venus se vaya a Marte y la Tierra a Plutón y ahí es cuando el sol termina perjudicado, porque su orden se ve alterado. Entonces tienes que ver que en tu sistema solar tu eres el sol, pero en el de los demás, simplemente eres un planeta y que si ellos se alejan de ti, en su sistema tu también te veras alejado de ellos.
Llegados a este punto debes tomar decisiones, quieres acercarte a su sistema, para que no se alejen en el tuyo (ya que los necesitas cerca) o das la libertad de que se alejen en el tuyo y pasas de acercarte en el de ellos (quizás si tú no eres importante para ellos, ellos no deben de ser importantes para ti tampoco o te harán daño).
Y ese es el quizz de la cuestión, en nuestra vida nosotros si sabemos que queremos que sea primordial para nosotros y lo que es simplemente superfluo, pero aunque nosotros seamos el centro de nuestra propia vida, no lo somos en los de las demás, por lo tanto nuestras prioridades e importancias, aunque sepamos organizarlas perfectamente, no se dan, porque dependen de otros factores y debemos acostumbrarnos a que lo que quizás hoy sea lo más importante en nuestras vidas, mañana quizás no ocupe ese lugar, aunque así no lo quisiésemos y que a lo que igual no le damos importancia, quizás mañana ocupe el lugar de lo que se nos ha distanciado.
Así que a la pregunta de que son esas pequeñas cosas o que son las más importantes para mí, podría contestarla desde mi prisma, desde mi sistema solar, pero obviamente erraría porque el orden que te diera, sería el que me gustaría y seguramente no tiene nada que ver con el que se da. Intento entonces dar importancia a todos los detalles de mis planetas, sean los más cercanos o los más lejanos, no solo en mis actitudes, sino también en las de ellos, e intentar no concentrar toda mi energía en un solo planeta, porque descuidas la importancia de los demás y terminas haciéndote daño…