Otra faceta que me llama la atención son esas personas históricas que han destacado en múltiples áreas y no sólo en una, en este caso, de quien vamos a hablar en este poste reúne las dos condiciones y me parece uno de los seres humanos más fascinantes que ha existido, de ahí su incalculable valor y que por momentos llegase a ser tan preciado para la gente más importante dentro de su entorno.
Mi fascinación por él ha ido creciendo a lo largo de los años y no me puedo imaginar con los medios que había en su época fuera capaz de crear inventos con mecanismos que muchos hubieran firmado o se han llegado a conseguir en pleno siglo XIX y XX. Me da la impresión que fue un hombre que podía dar lecciones de todo y, si no sabía de algo, es simplemente porque no le interesó o quiso invertir su tiempo en otro tipo de preocupaciones.
Una mente libre, una mente inquieta, capaz de llevar a cabo sus propias ideas hasta hacerlas tangibles, dedicando horas a comprender como llevarlas a cabo a través del estudio de otras artes u otras formas de vida. Lo que hizo que viera donde otros no somos capaces ni de imaginar, creando cosas increíbles e imposibles para su época.
1. LA VIDA DE UN AUTÉNTICO GENIO
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| AUTORRETRATO DE DA VINCI EN 1478 |
Pese a ser descendiente de una familia noble, fue un hijo ilegítimo ya que su padre messer Piero Fruosino di Antonio, notario, canciller y embajador en Florencia dejo embarazada en una relación extramarital a una campesina de quince años, Caterina di Meo Lippi. El padre de Piero pagó cierta cantidad a la joven madre para que se criase con él, a cambio también la casó posteriormente con un joven de cierto poder adquisitivo para que nunca le faltase algo que llevar a la boca.
A los cinco años, pese a no ser hijo del matrimonio, fue criado por su padre y su primera mujer, la cual no pudo tener descendencia en sus primeros años, volcando todo su cariño en él. Cuando Leonardo tenía doce, su primera madrastra, aunque considerada madre, moriría en el parto junto a quien iba a ser su primer hijo, casándose su padre en tres ocasiones más y haciendo a Leonardo el mayor de diez hermanos, si bien no siendo tan legítimo como el resto a ojos de la sociedad.
Fue su abuela paterna, Lucia di ser Piero di Zoso, de profesión ceramista, la que introdujo a Leonardo en el mundo de las artes descubriendo a temprana edad su habilidad con el dibujo. Por esta razón entregó algunos de sus bocetos a un taller dedicado a ello en 1469, cuando apenas tenía diecisiete años: "Un día, ser Piero tomó algunos de sus dibujos y se los mostró a su amigo Andrea del Verrocchio (un artista de renombre) y le pidió insistentemente que le dijera si Leonardo se podría dedicar al arte del dibujo y si podría conseguir algo en esta materia. Andrea se sorprendió mucho de los extraordinarios dones de Leonardo y le recomendó a ser Piero que le dejara escoger este oficio, de manera que ser Piero resolvió que Leonardo entraría a trabajar en el taller de Verrocchio. Leonardo no se hizo rogar y, no contento con ejercer este oficio, realizó todo lo que se relacionaba con el arte del dibujo".
Verrochio, de profesión herrero y orfebre, fue además pintor, escultor y fundidor trabajando directamente en Florencia para Lorenzo de Medici. Leonardo por su parte no puso ninguna pega para trasladarse a vivir a la capital, donde solía ir a menudo por los negocios de su padre.
Pese a que Andrea le tuvo un año, limpiando pinceles y barriendo, a Da Vinci no le importó pues después recibiría una formación única que le permitió ser la persona que hoy en día todos conocemos. Aprendió junto a su maestro las bases de la química, de la metalurgia, del trabajo del cuero y del yeso, de la mecánica y de la carpintería, así como dibujo, la pintura y la escultura sobre mármol y bronce. También recibió formación en la preparación de los colores, el grabado y la pintura de los frescos y al darse cuenta de su talento excepcional, el artista decidió confiar a su alumno el acabado de algunos de sus trabajos.
En
1478, con sólo veintiséis años, se desligó de su maestro para empezar su
labor como arquitecto siendo el encargado de levantar el Baptisterio de San
Juan. Anteriormente había destacado en este campo junto a su maestro y Filippo Brunelleschi en la construcción de la cúpula de la iglesia de Santa Maria di Fiore.
En los siguientes años el trabajo de Leonardo no pasó inadvertido, incluso para el propio Lorenzo de Medici que quedó prendado de una lira de plata en forma de cabeza de caballo y le otorgó sus servicios, incluyendo la lira de regalo a su rival, el mecenas y duque de Milán, Ludovico Sforza, con el fin de mantener buenas relaciones en 1487. En la actual capital de Italia, hizo principalmente labores de arquitecto como el estudio de la cúpula de la Catedral de Milán y a partir de 1490 empezó a interesarse por proyectos técnicos y militares además de estudiar el funcionamiento de diferentes herramientas de precisión como relojes, telares o grúas y en 1498 por la hidráulica intercediendo en proyectos de ríos y canales (estos como manera de higiene para la lucha contra la peste negra).
En 1499 las tropas de Luis XII de Francia invaden el ducado de Milán y Sforza huyó a Alemania, mientras que parte de las obras de Leonardo fueron destruidas debido a lo que representaban y otras tantas se las quisieron llevar a Francia como "La última cena" (1494-1498) aunque al final la dejaron en su lugar correspondiente. Da Vinci ahora trabaja para el conde de Ligny, Luis de Luxemburgo que le pidió informes para reforzar las defensas de la Toscana por si los italianos quisieran en algún momento recuperarla.
Fueron los turcos quienes quisieron invadir estor territorios, al igual que Venecia, sabiendo que el ataque iba a ser naval, Leonardo se las ingenió para inventar la escafandra submarina y llenó la ciudad de esclusas para inundar un pueblo cercano a Venecia por donde debía atacar el enemigo, cosa que nunca ocurrió. En 1503 regresó a Florencia donde estuvo dos años como ingeniero hidráulico y arquitecto, volviendo después a Roma tras un breve paso por Milán para trabajar bajo el mando de Maximiliano Sforza, hijo de Ludovico. En esta etapa se interesó por la anatomía humana, la biología animal y la ciencia. De nuevo tuvo que servir a las ordenes de Luis XII durante un tiempo tras su vuelta a Italia y en 1513 se pone al cargo de León X, el papa de los Medici.
Pese a que fue contratado para ayudar a Miguel Ángel y Rafael en la Capilla Sixtina, pronto fue devaluado a trabajos mucho más simples y mal pagados llegando a pronunciar la célebre frase: "Los Medici me han creado y me han destruido".
En 1515 el nuevo rey de Francia Francisco I reconquista Milán y un año más tarde el Papa León X encarga a Da Vinci un león mecánico que pudiera andar y que en su pecho llevase una flor de lis, como regalo al rey de Francia, incluyendo en el paquete al propio Leonardo, en una señal de pacto amistoso.
En el país invasor vive sus últimos años de vida al servicio del rey Francisco I, falleciendo el 2 de mayo de 1519 a la edad de 67 años en la ciudad de Amboise, entre sus especialidades destacó como pintor, anatomista, arquitecto, paleontólogo, artista, botánico, científico, escritor, escultor, filósofo, ingeniero, inventor, músico, poeta y urbanista.
2. SUS OBRAS PICTÓRICAS MÁS RECONOCIDAS
Una de sus facetas más conocidas fue la de pintor, de hecho entre sus obras se encuentra el cuadro más valorado e importante de todos los tiempos, por tanto era preciso hacer un repaso también de su vida a partir de sus lienzos apareciendo estos en orden cronológico:
1. LA ANUNCIACIÓN (0,98 m × 2,17 m - Galleria degli Uffizi, Florencia)
En un inicio fue atribuida a Domenico Ghirlandaio que coincidió en tiempo como aprendiz del mismo maestro, pero estudios y análisis posteriores a la obra sustentan la teoría de que esta pintura corresponde a uno de los primeros trabajos de Leonardo, si bien puede que toda no esté pintada por él y que la base y la Virgen habrían sido ejecutados por Verrocchio, mandándole acabar el trabajo. De Da Vinci sería el ángel, la alfombra de flores y el paisaje de fondo (el mar y las montañas), debido a estudios científicos de cómo fueron pintadas las alas y el descubrimiento de un dibujo preparatorio para las mangas del ángel atribuido a Leonardo. La diferencia entre la delicadeza del ángel y la majestad casi fría de la Virgen hace patente la mano de dos pintores distintos, además que en el enviado de dios aparecen técnicas como el sfumato y el claroscuro.
La obra representa el episodio de Nuevo Testamento en que el ángel visita a la Virgen para decirle que dará a luz al Mesías y fue encontrada en un monasterio donde permaneció escondida hasta 1867 siendo trasladada a la Galleria degli Uffizi.
2. RETRATO DE GINEVRA DE' BENCI (38,1 cm × 37 cm - National Gallery of Art, Washington)
El tamaño de la obra fue recortado, la forma original llegaba hasta la cintura de la joven e incluía la representación de sus manos descansando sobre su regazo.
La cabeza se encuentra enmarcada por las hojas de un arbusto de enebro, mientras que en el fondo se puede contemplar un cuidado paisaje natural.
La expresión de la joven es severa y altiva pues en aquella época las mujeres no podían sonreír mientras las dibujaban, no por ello exenta de coquetería pues Ginevra como la mayoría de las mujeres de aquella época en estos casos, se hizo un peinado de gala y se rasuró las cejas.
3. LA VIRGEN DE LAS ROCAS (1,90 m x 1,10 m - Louvre, París)
Las figuras se encuentran frente a una gruta y sus formas están envueltas en una bruma (sfumato) en un perfecto ejemplo del dominio del claroscuro característico en su obra que le confiere a la pintura un carácter casi surrealista que representa a San Juan niño adorando a Jesús en presencia de la Virgen y un ángel.
El significado no es de fácil interpretación, por la forma de los gestos de cada uno siendo todos diferentes: el ángel apunta con su dedo índice en dirección a San Juan que está en posición de adoración hacia un niño Jesús que le está bendiciendo mientras su madre, la Virgen lo protege.
4. HOMBRE VITRUVIANO (hoja de cuaderno, Galleria dell'Academia)
El nombre proviene de textos que acompañan la grafía basados en la obra del arquitecto romano Marco Vitruvio Polión. Es considerado un estudio de las proporciones y una perfecta yuxtaposición entre ciencia y arte, así como uno de los trabajos más significativos del artista, científico e inventor Leonardo da Vinci: El rostro, desde la barbilla hasta la parte más alta de la frente, donde están las raíces del pelo, mide una décima parte de la altura total. La palma de la mano, desde la muñeca hasta el extremo del dedo medio, mide exactamente lo mismo. La cabeza, desde la barbilla hasta su coronilla, mide una octava parte de todo el cuerpo. Desde el esternón hasta las raíces del pelo equivale a una sexta parte de todo el cuerpo. Desde la parte media del pecho hasta la coronilla, una cuarta parte de todo el cuerpo. Del mentón hasta la base de la nariz, mide una tercera parte del rostro. La frente mide igualmente otra tercera parte del rostro. El pie equivale a un sexto de la altura del cuerpo. El codo, una cuarta parte de todo el cuerpo. El pecho equivale igualmente a una cuarta parte de todo el cuerpo. El ombligo es el punto central natural del cuerpo humano. Si se coloca un hombre boca arriba, con las manos y los pies estirados, situando el centro del compás en su ombligo y trazando una circunferencia, esta tocaría la punta de ambas manos y los dedos de los pies. La figura circular trazada sobre el cuerpo humano nos posibilita el lograr también un cuadrado: si se mide desde la planta de los pies hasta la coronilla, la medida resultante será la misma que se da entre las puntas de los dedos con los brazos extendidos. .
5. DAMA CON EL ARMIÑO (54 cm x 39 cm, Museo Czartoryski, Cracovia)
La historia de mantenimiento del cuadro ha sido un milagro, pues en 1800 fue comprada por un príncipe polaco que la hizo repintar en varias ocasiones y tras acabar exiliado se mantuvo escondida durante décadas debido a invasiones y guerras, siendo encontrada de manera casual en 1939 durante la invasión nazi al país por un soldado de las SS.
Debido a los malos tratos que ha sufrido a lo largo de los siglos, el fondo original de la pintura desapareció, así que decidieron oscurecerlo, además parte del vestido fue agregado así como el cabello que se entorna alrededor de la barbilla.
Gracias a una profunda restauración, se reveló una puerta en el fondo original y que presumiblemente Da Vinci pudo haber cambiado de idea al pintar la figura ya que originalmente la posición de los brazos de la dama era diferente y el armiño se agregó posteriormente.
6. LA BELLE FERRONIÈRE (62 cm x 44 cm, Louvre, Paris)
La mujer que aparece en la pintura es desconocida, aunque seguramente perteneciese a la hija o esposa de un herrero con suficiente dinero como para poder contratar a Da Vinci durante esa época.
Se trata de uno de los cuatro retratos que hizo el pintor, grupo que se completa con la Mona Lisa, Dama con armiño y Givevra de' Benci, todos ellos comentados en este punto.
7. LA ÚLTIMA CENA (4,6 m x 8,8 m - Convento de Santa Maria Delle Grazie, Milán).
La pintura representa la última cena de Jesús con
sus apóstoles, siendo el protagonista el centro de la composición y viéndose
detrás de él una ventana que es donde encontramos la perspectiva y el punto de
fuga, además de apreciar sobre su cabeza un frontón que hace las veces de
aureola. El momento captado es después de anunciar a sus discípulos que uno de
ellos le traicionará, pudiéndose ver la gesticulación agitada de las figuras
alrededor del Mesías, pensando en que fueran culpados sin saber porqué, en
contraste con su calma y serenidad. Algo significativo es que fue una de las primeras pinturas en representar a Jesucristo y sus discípulos de manera humanizada y no con ese halo de deidad.
En el presente hay que hacer un esfuerzo para imaginar todo el esplendor de aquella pintura original, aunque no por ello sigue siendo un milagro que aún pueda ser contemplada.
8. SALVATOR MUNDI ( 45.4 cm × 65.6 cm, comprador anónimo).
La composición representa a Cristo como salvador de mundo, sosteniendo un globo de cristal con su mano izquierda y bendiciendo con su mano derecha, vestido con ropajes típicos del Renacimiento.
Durante los años 1763 hasta 1900, la pintura desapareció e incluso creyeron que había sido destruida. Casualmente fue descubierta y después de ser restaurada se atribuyó su autoría a Da Vinci, aunque algunos expertos creen que este cuadro no es suyo.
Eso no fue óbice para subastarla como si la hubiese pintado, llegando a un récord monetario jamás imaginado ya que la cuantía se elevó hasta 450.312.500 millones de dólares.
9. LA MONA LISA (77cm x 53 cm, Museo del Louvre, Paris)
En este retrato, Leonardo colocó la figura en primer plano, nítida, mientras que el paisaje es suavemente difuminado, consiguiendo una sensación de distancia respecto del paisaje, pero de cercanía respecto de la figura retratada. Una técnica mixta que combina es uso del sfumato y la perspectiva atmosférica, que influirá posteriormente en el Barroco y en pintores tan célebres como Velázquez.
En cuanto a su sonrisa, ya sabemos de antemano que en aquellas fechas lo normal era salir en un retrato con pose seria, pero Da Vinci se inspiró en la influencia de la sonrisa arcaica del arte griego tan arraigada en el Renacimiento y no sería la primera vez que viésemos esta técnica en la obra del artista, pudiendo ver algo similar en Santa Ana y San Juan, aunque ellos eran personajes eclesiásticos y no de carne y hueso presentes en la sesión.
La obra fue adquirida por Francisco I, rey de Francia desde 1515 hasta 1547, gracias a que Leonardo en su última etapa trabajaba para él y a 12.000 francos de la época, siendo robada en 1911 en el mayor atraco de la historia al Museo del Louvre y recuperada dos años más tarde.
10. LA VIRGEN,EL NIÑO JESÚS Y SANTA ANA (168 cm X 112 cm, Museo del Louvre, Francia)
Se nota que es de la misma época que el retrato de la Gioconda por la sonrisa en las mujeres, la representación nítida de las figuras en contraposición con un fondo rocoso y poco definido y el uso perfectamente medido del sfumato en los contornos de la abuela. El modo en que están representadas las figuras no es casualidad creando una forma piramidal, aunque llama sobradamente la atención que sea María la que se encuentra sentada en el regazo de su madre y no el niño en el de ella como suele ocurrir en este tipo de obras iconográficas.
11. AUTORRETRATO (33 cm x 21,6 cm, Biblioteca Real de Turín)
Tras su muerte, todos sus libros y manuscritos pasaron a manos de Francesco Melzi, su fiel colaborador, pero la colección de tan valiosos escritos se fue dispersando entre los hijos de éste en las siguientes generaciones, perdiéndose dicho retrato durante siglos al no saber si fue vendido o cedido a otras personas por algún descendiente, reapareciendo a mediados del S. XIX en Milán, gracias a ser copiado y reproducido en otro libro, sabiendo la ubicación del original. Poco después nuevamente desaparece, volviendo a encontrarse en 1840 en posesión de un mercader de cuadros que lo habría adquirido posiblemente en Inglaterra o Francia y se lo vende a Carlos Alberto de Saboya junto a obras de otros grandes artistas como Rafael y Miguel Ángel, donándolo posteriormente a la Biblioteca Real de Turín.
12. SAN JUAN BAUTISTA (69 cm x 57 cm, Museo del Louvre, Paris)
Da Vinci huye de los dibujos eclesiásticos que había hecho anteriormente para hacer un San Juan Bautista lejano al personaje delgado y feroz, dotándole de trazos más femeninos que masculinos, con ropa de lana de oveja, mostrando sensualidad y cierto carácter seductor, como si fuese uno de los sátiros de la mitología griega.
El dominio del claroscuro y la casi nulidad del fondo hacen que la obra sea inquietante y perturbadora, ayudado por una pose extravagante, apuntando lo alto con el dedo índice de la mano derecha para reforzar la importancia del bautizo en el Espíritu para la salvación del alma y acompañado de esa sonrisa de la que hemos estado hablando en esta su última etapa.
Dicen que cuando Leonardo aceptó la invitación de Francisco I a mudarse a Francia en 1517, decidió llevarse consigo sólo tres cuadros: la Mona Lisa, La Virgen, el Niño Jesús y Santa Ana y San Giovanni Battista.
3. TAMBIÉN FUE ESCULTOR...
Uno de sus primeros trabajos en este sector fue un pequeño grupo de cabezas de mujeres y niños esculpidas en mármol y yeso que el propio Verrocchio mandaba hacer habitualmente a sus discípulos para probar sus destrezas en diferentes artes. Gracias a dios, los bocetos del artista revelan como preparó dicho trabajo midiendo con precisión las diferentes partes de la cabeza para tener posteriormente una guía a seguir. Por desgracia no queda ni rastro de este trabajo del que también da fe Giorgio Vasari, colega de Da Vinci además de coetáneo.
Años después, entre 1489 y 1494, bajo las ordenes del duque de Milán Ludovico Sforza, se le mandó crear una estatua ecuestre del padre de éste, Francisco I Sforza. Da Vinci pensó a lo grande y su proyecto fue realizar un trabajo basado en bronce cuyo caballo (Il Cavallo) iba a pesar setenta toneladas de bronce. Pese a hacer la versión en arcilla, la impresionante escultura nunca llegó a terminarse, pues el metal destinado a la escultura, tuvo que fundirse para crear cañones para defender la ciudad de los ataques de Carlos VIII de Francia.
No fue la única estatua ecuestre que no llegó a materializar, entre 1506 y 1511, bajo las ordenes francesas se le pidió que hiciese una del Mariscal Gian Giacomo Trivulzio, que al principio estuvo bajos las ordenes de Ludovico pero tras la conquista francesa se cambió de bando para servir a Luis XII para el cual trabajaba Leonardo, que le nombró gobernador de Milán y como tal necesitaba una estatua en su ciudad. Curiosamente los múltiples bocetos de esta obra fueron encontrados en la Biblioteca Nacional de Madrid en 1965, llamados popularmente Códices de Madrid.
Todos pensaban que no existía en la actualidad ninguna escultura del artista, hasta que se demostró que "La virgen con el niño sonriente" de 50 cm de altura y 14,2 kilos de peso, que se encuentra desde 1858 en el Victoria and Albert Museum de Londres y atribuida hasta hace muy poco a Antonio Rossellino (1427-1479), en realidad es de él. Francesco Caglioti, profesor de historia en la Universidad Federico II de Nápoles así lo asegura y muchos de su gremio le han dado veracidad: “La ropa, las manos, el cabello y especialmente las sonrisas de la Virgen y el pequeño Jesús, hay mil detalles que disipan cualquier duda con respecto a la atribución: las túnicas de la Virgen y el manto rojo del arcángel en La Anunciación de Leonardo, el movimiento de la tela es el mismo”.
4. LOS PRINCIPALES INVENTOS DE LEONARDO
Como hemos comentado, Da Vinci no se dedicó a una sola especialidad, era docto en muchos campos y un prolífico inventor, a continuación os dejamos con diez de sus obras más importantes e impactantes para la época y un slideshare con 28 de sus inventos, todos ellos realizados con una idea común facilitar la vida del hombre en las diferentes áreas.
1- HELICÓPTERO (Hélice)
Si bien el autogiro, ancestro directo del actual helicóptero fue construido por el español Juan de la Cierva en 1920, cuatro siglos antes Leonardo ya había pensado en la hélice de este aparato como otro medio alternativo a las alas para poder volar creando un artilugio que a pequeña escala era prácticamente perfecto.
2- MÁQUINA DE GUERRA O MORTERO DE 33 CAÑONES
La mayoría de las batallas de ciudades asediadas se perdían por el problema del tiempo que se tardaba en volver a cargar el cañón, segundos y minutos que el enemigo aprovechaba para avanzar y contraatacar. Da Vinci ideo una manera muy efectiva para acabar con dicho problema, tres filas de 11 cañones cada uno, todos conectados a una sola plataforma giratoria, mientras se disparaba la primera, la otra se enfriaría y la tercera ya estaba cargada, permitiendo disparar de forma repetida sin tener apenas interrupción hasta acabar la artillería. Una especie de ametralladora rudimentaria.
3- BALLESTA GIGANTE
Otro elemento disuasorio en las batallas fue una ballesta gigante de 25 metros de largo, diseñada especialmente para la intimidación de sus enemigos. Para transportar esta arma de dimensiones descomunales se le colocaron seis ruedas (tres a cada lado), y el arco era de madera fina para la flexibilidad.
4- PARACAÍDAS
Aunque el invento se lo atribuyen a Sebastien Lenormand en 1783, Leonardo lo pensó siglos antes, dejando patente su propia invención con esta descripción: "Si un hombre tiene una tienda hecha de lino, cuyas aberturas han sido todas taponadas, y será doce braccias (unos 23 pies) de ancho y doce pulgadas de profundidad, podrá arrojarse desde cualquier gran altura sin sufrir ningún daño". La idea de Da Vinci era perfecta, pero tuvo un error de cálculo no inventar un arnés de sujeción para la persona que lo usaba y por tanto cayendo al vacío en varias ocasiones mientras el invento funcionaba tal y como lo conocemos hoy en día
5- MÁQUINA VOLADORA
Tras interesarse por la anatomía humana, hizo lo propio con la de los animales, estaba ensimismado por el vuelo de los pájaros, pensando que un día el hombre pudiera hacer lo mismo. Uno de sus inventos más famosos fue la máquina voladora (también conocida como "el ornitóptero") estando inspirado en el vuelo de los animales alados, su forma es muy similar a lo que hoy conocemos como ala delta. En sus notas, menciona los murciélagos, barriletes y aves como fuentes de inspiración.
6- RELOJ
Aunque los relojes ya existían desde la época de los egipcios, Leonardo diseñó el más preciso de los existentes en su época, que solo mostraban horas o minutos. El reloj de Da Vinci tenía dos mecanismos separados: uno para los minutos y otro para las horas además de tener un dial para seguir la pista de fases de la luna y estaba compuesto de pesos, artes y arneses elaboradamente conectados.
7- VEHÍCULO BLINDADO
Aunque la autoría de los tanques la historia se la otorga al ejército británico para tener ventaja durante la Primera Guerra Mundial, ya para el S.XV Leonardo había inventado vehículos capaces de moverse en cualquier dirección y equipados con cañones ligeros sobre una plataforma circular con ruedas que permitían un rango de 360 grados, con el fin de dispersar las líneas enemigas y con ellas un ataque frontal.
8- EQUIPO DE BUCEO
Durante las guerras con los turcos (1500-1503) Da Vinci trabajaba en Venecia, queriéndose aprovechar de las cualidades de la ciudad diseñó un equipo de buceo para los ataques furtivos de los barcos otomanos. El traje estaba hecho de cuero y estaba equipado con una máscara que pasaba por encima de la cabeza del buceador y alrededor de la zona de la nariz había dos tubos de caña que conducía a una campana de buceo de corcho que flotaba en la superficie. De esta manera un solo individuo bajo el agua podía hundir varias naos enemigas sin que estos se dieran ni cuenta.
9- PUENTE GIRATORIO
El puente giratorio fue diseñado para el Ludovico Sforza, pudiendo ser empacado y transportado para su uso por los ejércitos en movimiento. Al encontrarse con un rio, el puente se balanceaba y se ponía al otro lado para que los soldados pudieran pasar sin problemas gracias a un sistema de ruedas que incorporaba cuerdas y poleas para un empleo rápido y fácil transporte. Lo más pesado era un tanque de contrapeso que servía para contrarrestar el equilibrio.
10- GRÚA GIRATORIA
Ya sabemos que durante gran parte de su vida le tocó ejercer de arquitecto y por ello se empapó muy bien del sistema de poleas que servían para izar los elementos de la construcción a las partes más altas de los edificios florentinos. Lo malo era que al estar ancladas en un punto fijo, los elementos a veces quedaban a desmano en las alturas, así que Da Vinci ideó una grúa giratoria que no solo podía elevar material, sino que también permitían el transporte rápido de materiales.
5. EL RESTO DE AVANCES QUE HAN QUEDADO PARA LA HISTORIA
A través de sus más de 13.000 páginas de texto y dibujos que se recogen en sus diarios, hemos comprendido mejor la capacidad de Leonardo en todos los ámbitos en los que se interesó.
No se entiende el Humanismo Renacentista sin sus estudios de ciencia y artes combinados en una filosofía natural basada en la observación, definiéndose como un "iletrado" al sentirse consciente y orgulloso de ser autodidacta dentro de un aprendizaje forjado en observar fenómenos naturales que no se solían estudiar en la escuela. También esta faceta de filósofo está unida a la de poeta, aunque más bien dejó para la historia muchos dichos inspirados en los escritos grecorromanos que dan que pensar a quien los lee.
En la década de 1490, estudió matemáticas junto a Luca Pacioli un grandísimo matemático y monje franciscano de la época, aprendiendo el uso complejo del ábaco, la geometría euclidiana (la cual usaría para reflejar los espacios tridimensionales en perspectiva y mecánica) y posteriormente le ayudaría a éste área con la solución mecánica del problema del Alhazen a través de un profundo conocimiento de las entidades cónicas y los reflejos ópticos, la invención de la calculadora y la publicación del libro "La Divina Proportione" de 1509.
Pese a ser muy limitado en el campo de la física, de nuevo el poder de la observación le valió para hacer cálculos de balística en sus inventos, siendo muy preciso en el campo de tiro con el armamento que patentase, indicó avances en los estudios de la luz y la óptica (de nuevo ponemos aquí la resolución del problema de Alhazen), en hidrología una ley sobre los cursos del agua llevaba su nombre (recordemos que fue capaz de idear como inundar un pueblo contiguo a Venecia a través de las acequias de esta ciudad por si eran atacados desde ese flanco por los otomanos), en la química ayudó con la creación de un alambique y ciertas resoluciones alquímicas, arte que practicó en su etapa en Roma.
La anatomía humana fue uno de sus hobbies mientras estudiaba en el taller de Verrocchio, allí aprendió sobre la anatomía topográfica, realizando numerosos estudios sobre músculos, tendones y otras características anatómicas visibles como el corazón y el sistema vascular (explicando la crisis cardiaca), del sistema reproductivo y otros órganos internos (dibujando al feto dentro de la placenta), y gráficos sobre la acción del ojo... Dedicó gran parte de su tiempo en diseccionar cadáveres humanos del hospital Santa María Nuova de Florencia y posteriormente en los de Milán y Roma. Incluso entre 1510 y 1511 colaboró con el reputado médico Marcantonio Della Torre con un trabajo de más de 200 dibujos sobre la anatomía que se conservó con el nombre de "Tratado de pintura" dando lugar a errores, ayudando a los futuros médicos a comprender a través de sus grafías a comprender y estudiar mejor el cuerpo humano.
Gracias a esta afición que evolucionó también en el conocimiento de los animales, se convirtió en un pionero en paleontología siendo una de las primeras personas en documentar todos los fósiles que iba encontrando, recogidos sus estudios en el Códice de Leicester y reconociendo que los fósiles eran restos de seres vivos, y que la Tierra debía ser mucho más antigua que lo que la mayoría de sus contemporáneos creían que era.
En sus escritos también muestra interés por la botánica, dibujando con exactitud diferentes tipos de plantas y mostrando su interés en la forma de crecer de los árboles, lo cual ayudó como en medicina a los futuros estudiantes en esta rama: "Si un arco centrado en el tronco de un árbol se dibuja a través del sistema de ramificación, la suma total de las áreas transversales a través de ese arco sería la misma que la zona en cualquier otro arco dibujado desde el mismo centro". Además fue de las primeras personas en potenciar al ser humano como vegetariano: "Llegará un tiempo en que los seres humanos se contentarán con una alimentación vegetal y se considerará la matanza de un animal como un crimen, igual que el asesinato de un ser humano".
Pocas personas saben que Leonardo era un excelente músico, tanto
a la hora de cantar como de tocar la lira acompañando su voz. Sus aportaciones a
este sector fueron muchas, ya que se han encontrado una gran cantidad de
mejoramientos a muchos instrumentos de la época, rediseños que mejoraban la
calidad y la facilidad de tocarlos, además de imaginar sonidos nuevos, texturas
y profundidades que hoy en día siguen siendo curiosos. Instrumentos como la lira de plata con forma de cabeza de caballo, el órgano
de agua, el tambor mecánico, la carraca de tubos alineados, el órgano de papel,
la viola organista o el estudio de los sonidos de la campana, produjeron grandes
avances en este campo en el periodo renacentista. Si queréis saber algo más sobre su faceta como músico no dudéis en visitar esta entrada del blog de Miguel Ángel LETRAS PRESTADAS - CLUB PICWICK: "LEONARDO DA VINCI Y LA MÚSICA"
Hola, Edu. Me ha gustado mucho aprender la historiografía de este gran artista e inventor, polifacético donde los haya. Saludos.
ResponderEliminarSin duda Marisa, me parece uno de los personajes más fascinantes de la historia y tenía ganas de hacerle una entrada. Me alegro mucho saber de nuevo de ti, es una buena señal, a dar caña....
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