SOBRE ESA COSA LLAMADA AMISTAD

He de decir en mi contra que en los últimos años he pensado que la amistad se basa en factores lucrativos y temporales. Lucrativos desde el punto de vista que si esa persona te “sirve” de algún modo es mejor dorarle la píldora para conservarlo, ya que vas a terminar sacando provecho de él y Temporales, porque esa clase de amistad, cuando ya la has sacado provecho y “no sirve de nada” termina siendo finiquitada. Que conste que con el termino finiquito, no quiero aludir a que ya no vas ni a saludar a esa persona, pero obviamente no vas a tener el mismo trato.

Pues bien, en los últimos años he estado rodeado de mucha gente y muchas veces me he sentido sólo, aun viendo a mí alrededor montones de personas conocidas. A eso hay que juntar lo que te dan de cara y lo que dicen de ti a las espaldas, cosa que no considero justo, no tengo muchas virtudes, pero si una me gusta es que si estoy bien con alguien se me nota y si no lo estoy pues también, en verdad no engaño, ni me tengo que escudar en mentiras para seguir tirando del carro. Todas estas movidas siempre me han parecido innecesarias, por lo cual, muchas veces prefiero sentirme o estar solo que rodeado de esa clase de gente… Pero este escrito no va de eso.

Coincidiendo con otra despedida de soltero de la cuadrilla, ves cosas que habitualmente echas en falta, es curioso que tu gente, a los que muchos no ves en meses o años y a los que ver juntos prácticamente es una utopía, se junta para celebrar algo o pasar un rato juntos y aunque todo este planeado penosamente, sale bien.

Te echas unas risas, disfrutas de esas horas y te das cuenta de que te valoran, cosa que no puedes decir de muchos de los que encabezaban el primer párrafo y te sientes parte de algo, al contrario que con los otros mencionados. Son esa clase de gente que te dice mañana tienes que estar aquí y estas, sin pensarlo; que mencionan de hacer algo y a alguno pues no le va el tema, pues al final se acopla por la mayoría y se lo pasa mejor que ellos, por la compañía. Porque es esa clase de gente, que aun no viéndote en tanto tiempo, se les puede hablar con franqueza, se les puede decir tus inquietudes y te dirán lo bueno o lo que no quieres oír, simplemente porque es lo que creen mejor para ti.

Y en esos eventos, o días señalados, lo único que te apetece es disfrutar, hacer el gamberro, salir en fotos y esperar que las horas no pasen deprisa, porque te costará mucho tiempo tener un ambiente como ese. Son días en los que los malos rollos momentáneamente se evaporan y en los que te sientes pieza de ese engranaje, puesto que cada uno tenemos nuestra utilidad. Eso es lo que llamo amistad, no tener que llamar cierto día a alguien porque no tienes con quien salir, o pedirle algún favor, o simplemente contarle algo porque sabes que él te va a devolver algo parecido a una solución y después si te he visto no me acuerdo, y si estas mal te aguantas. Por suerte, aunque tienda a la extinción todavía tengo gente que no son así y que se que si los necesito van a estar ahí porque eres uno más y no un kleenex de usar y tirar. A algunos les vendría bien entender esto, porque su mente no tiene suficiente espacio en el disco duro para comprender esa especie de trato.