CURIOSIDADES DE LOS APELLIDOS...

Apellido: Nombre que sigue al nombre de pila de una persona y que se transmite de padres a hijos.

El ser humano no siempre ha tenido apellidos, a través de este post descubriremos cuando nacen, el porqué no todos los países tienen varios por persona, el motivo de su creación y diferentes curiosidades de distintas índoles.

Un legado que transmitimos de generación en generación y que se puede quedar con el paso de los siglos o perder dependiendo del linaje.

Un vestigio que nos ayuda a saber de dónde procedemos y quienes pudieron ser nuestros antepasados, dándonos cuenta también que a veces es difícil seguirles la pista al ser modificados a lo largo de los años, ya sea por el lenguaje o las familias o porque creemos que derivan de un lado y al final terminan partiendo de otro.

"El apellido es una de las señas de identidad más grandes que tenemos. Aunque aporta cierta información sobre el origen de una persona, en la actualidad esto es absurdo porque el apellido es algo heredado, que en ningún caso define al individuo". Antonio Alfaro de Prado, genealogista y presidente de la Asociación Hispagen.

Veremos cuáles son los más comunes en España y cada una de sus comunidades y tocaremos en algún momento el tema de la heráldica y como asociaron el apellido de la familia a los diferentes escudos de armas como hemos podido ver también en las entradas dedicadas a las BANDERAS (1, 2 y 3).

1. ETIMOLOGÍA

La palabra apellido proviene del verbo latino appellitare (llamar repetidamente), o lo que es lo mismo de la unión del prefijo ad- (hacia) y el verbo pellitare (frecuentativo del verbo pellere, cuyo significado es empujar o poner en movimiento). De esta locución también nace el verbo apelar del verbo appellare (empujar a uno con la palabra o hablar con autoridad).

Así la palabra apellido fue traducida en su día como "invocar, llamar o dar un nombre", pero también podría ser traducido como "cognomino". El cognomino proviene del latín cognomen  que hace referencia al segundo apellido o apellido de la familia.

En tiempos de los romanos, los varones tenían un nombre compuesto por tres elementos, la tria nomina: a) el Praenomen que era su propio nombre individual (en francés al nombre de la persona se le sigue conociendo como prénom), b) el Nomen o Nomen Gentilicicium que es una especie de nombre de linaje perteneciente a la familia genérica de la que desciendes y c) el Cognomen que era el nombre derivado directamente del padre y pertenecía a la familia directa, siendo generalmente un apodo. Por ejemplo: Cayo Julio César, el nombre Cayo es el real (Gaius), Julio proviene de la casa familiar Julia y César (Caesar) hace referencia a su padre y la cabellera que lucía o Marco Emilio Escauro, su nombre real era Marco, provenía de la familia Emilia y Escauro era el "apodo" de su padre y significaba que era de pie zambo.

Pese a esta regla romana, el apellido tal y como lo conocemos se empezó a usar muchos siglos más tarde y por otras razones diferentes. También debemos hacer referencia a los griegos que de alguna forma también son participes de esto al nombrar a mucha gente que pasó a la historia seguida del pueblo al que pertenecían.

2. LA HISTORIA DE LOS APELLIDOS

ÁRBOL GENEALÓGICO

No es hasta la Edad Media (entre los siglos X y XI siendo más específicos), cuando empiezan a ser necesarios. En la Antigüedad la civilización solía dividirse en pequeños poblados y en cada uno de ellos las personas se conocían y poseían cada uno diferentes nombres.

Con la aparición de las ciudades y con ello poblaciones más altas, se comenzó a tener un problema de referencias pues había bastantes personas que se llamaban igual y de alguna forma debían diferenciarse entre ellos, ya sea por características físicas, lugar de procedencia, oficio al que se dedicaban o ser los hijos de..., pero de este tipo de cosas hablaremos en el siguiente punto.

Cuando esto ocurrió en diferentes culturas empezaron a mezclarse e incluso traducirse naciendo con ello nuevos apellidos, siendo un caos completo y desorganizado. Por ejemplo dos hermanos podían tener diferentes apellidos, recogiendo uno el familiar y el otro el de su oficio, desviando de alguna forma su parentesco.

Esto cambió en el siglo XII cuando las casas reales adoptaron el apellido familiar y crearon con ellos sus escudos, los cuales siguen perdurando en el tiempo, pero para el resto de individuos alejados de la nobleza, hubo que esperar hasta el s.XV para poder ser heredados familiarmente y no tener cada persona su propio apellido.

En el XVII, los aristócratas llevaron el apellido un paso más lejos y para diferenciarse de la plebe optaron por anexionar los apellidos del padre y de la madre con la conjunción "y" creando apellidos muy extensos.

Ya a partir del siglos XIX, con la creación del Registro Civil en España con el afán de recaudar impuestos a la población y crear un censo para las votaciones en elecciones en 1857. Desde ese momento todos los españoles fueron registrados con dos apellidos del padre y madre, figurando así en la actualidad.

3. ORIGEN DE LOS APELLIDOS ESPAÑOLES: ETIMOLOGÍA, USO Y EXPANSIÓN

Una vez aclarado el porqué  fueron necesarios los apellidos, conviene saber un poco de su origen en nuestro país. Éste suele ser diverso y proviene de diferentes sitios, he aquí los diferentes caminos más comunes que siguieron nuestros apellidos:

1. ETIMOLOGÍA DEL APELLIDO: De donde proviene el apellido en sí, su procedencia lingüística, su significado y uso originario. Muchos de nuestros apellidos suelen proceder de etimologías de términos prerromanos, latinos, griegos, fenicios, godos, judíos, árabes, castellanos, catalanes, vascos, franceses, ingleses... Heredamos su historia a través de sus términos y por ende es lógico que haya apellidos derivados de ellos. Aunque no tenga ninguno de estos dos apellidos, voy a poner de ejemplos dos que de alguna manera me tocan indirectamente: por un lado tenemos un apellido de pueblo como puedes ser Leiva, localidad riojana de etimología prerromana traducida como "vega de la grava", cuyos habitantes recogieron de apellido al vivir allí y por otro está el apellido Duarte, que proviene del germánico Edward, de origen gótico y traducido como "guardián de la riqueza" y que en español nos origina el nombre de Eduardo, ahora entenderéis porque no existe Eduardez, y a su vez os habréis dado cuenta que ese nombre si está presente entre los apellidos.

2. USO COMO APELLIDO: Otra vía diferente de coger directamente nombres ya preestablecidos y con su propia etimología es conocer el porqué comenzaron a usarse como apellido, llevándonos a una clasificación recurrente en todos los tratados genealógicos:

a) Patronímicos: "Aquellos que denotan filiación, haciendo referencia al nombre propio del padre o antepasado". La forma más extendida y común de nuestros apellidos, fijándonos en la cultura árabe que tantos siglos convivió en la Península, y cuyos nombres de pila iban seguidos de "Ibn" y el nombre del padre. Ibn significa directamente "hijo de" y en España se hizo común usar como apellido el nombre del padre con el sufijo "-ez" que al a postre significa lo mismo (Martínez, Núñez, Fernández serían hijos de Martín, Nuño y Fernando). En algunos casos el sufijo tuvo que variar quedándose en un simple añadido de la "-z" o una variante (Ruiz hijo de Rui, Muñiz o Muñoz hijo  de Muni/Muñi) , otros directamente no modificaban el nombre de su progenitor (Berenguer, Martín o Manrique) y en la zona levantina fue más común el uso del sufijo "-is"(Peris hijo de Pere, Llopis hijo Lope). Algunos investigadores creen que todos ellos provienen  del genitivo latino en "is", indicando valor de posesión o pertenencia, aunque otros opinan que se trata más bien de un sufijo de origen prerromano.

b) Toponímicos: "Aquellos nombres de población (Arteaga, Peñaranda…), topónimos  o incluso micro-topónimos (Roca, Bosque, Fuente…) y gentilicios (Catalán, Franco, Sevillano…) que las personas comenzaron a emplear para indicar su origen".  Por ejemplo  Martín de Espinosa solía indicar que había nacido en esa localidad o era descendiente directo de una persona que lo había hecho allí o Rui de la Fuente, indicaba que vivía cerca de una.

c) Oficios: "Empleos, cargos u oficios que las personas usaron junto a su nombre y que transmitieron a sus descendientes".  Ejemplos muy claros de diferentes gremios en los apellidos pueden Herrero, Zapatero, Escudero, Cantero, Labrador o Pastor.

d) Motes o Apodos: "Expresiones sobre las cualidades físicas o morales de los individuos, que fueron heredadas". Rubio, Castaño o Moreno por el color de su cabello, Gallardo por su buen aspecto o por su elegancia o Luengo por su gran altura.

e)  Apellidos españolizados. "Residualmente podríamos considerar también apellidos españoles al de aquellos extranjeros que siglos atrás adaptaron la forma original de sus apellidos, otorgándoles una pronunciación y grafía  más española". Muchos de ellos llegado a través de Sevilla, ciudad que monopolizaba el comercio con Indias , trajeron apellidos como Malcampo (Maelcamp), Maestre (Meester, aunque también puede provenir del oficio de Maestre/o) o Bécquer (Becker)

3. EXPANSIÓN DEL APELLIDO: Conociendo el dónde y el porqué, sólo nos queda saber el cómo terminó globalizándose el uso del mismo, pudiendo resolver misterios del porqué hay apellidos muy comunes y otros más exclusivos.

Hay apellidos que se extendieron entre diversas ramas sin tener ningún parentesco entre ellas, un aspecto clave y desconocido que generalizó ciertos apellidos a nivel del planeta con el descubrimiento de América y la conquista de otros países durante los siglos que perduró el mayor periodo de expansión de la corona de España. 

Así mismo este desconocimiento también es un punto importante a la hora de darnos cuenta que otros tantos apellidos cayeron en desuso o desaparecieron entre las descendencias de sus ramas familiares, mientras siguieron surgiendo otros, abriendo un gran abanico de posibilidades entre los más comunes y los menos escuchados.

Por último la mezcla de culturas y las relaciones personales que surgieron de ellas, es otro punto más a sumar entre apellidos más inusuales dentro de un país que perfectamente pueden ser genéricos en el de origen.

La suma de estos tres puntos y el escaso seguimiento de los apellidos familiares más allá del Registro civil hace siglo y medio, es un hándicap en contra de los estudios heráldicos familiares, encontrándose en un laberinto con muchos caminos sin salida cada vez que les toca retroceder en generaciones e intentar resolver el origen del mismo dentro de ese núcleo de personas que lo han llevado durante cientos de años.

4. LA HERÁLDICA

HERÁLDICA DE VARIOS APELLIDOS

Para conocer esta ciencia basada en entender y componer adecuadamente los escudos de armas y el código de reglas que permite representar y describir los mismos, debemos saber primeramente el significado de la palabra.

Proviene de la figura del Heraldo, que era la persona que anunciaba y describía a los caballeros inscritos en un torneo. Cuando la nobleza decidió apellidar el linaje de su familia y posteriormente simbolizarlo con un escudo representativo, creó el primer registro civil de la historia que algunos datan con los primeros escorzos en el siglo XI y otros historiadores lo hacen en el XII, siglo en el que esta ciencia cogió peso.

Hay que borrar la idea que la heráldica apareció esporádicamente en diferentes países y en distinto tiempo. Fue algo meramente implantado a nivel europeo durante el siglo XII por las diferentes casas reales y nobles.

Tras este hecho y con el paso de los siglos fue convirtiéndose en el primer código coherente a la hora de identificar a personas, si a eso sumamos que con el paso del tiempo hubo más nobles y con ellos más apellidos, se pudieron datar muchos de ellos gracias al estudio de sus propios escudos, que adoptaron también ciertos gremios. 

Esto supuso gracias a la datación de la Iglesia Católica, para una cosa que hacen bien no se la voy a negar, una catalogación genealógica fundamentada en la jerarquía, los gremios y las asociaciones, además de servir para identificar otras ramas como ciudades, regiones, países y diferentes colectivos sociales, lo que llevó a expandir más si cabe el número de apellidos gracias al punto dos del anterior apartado.

5. LOS APELLIDOS MÁS POPULARES EN PAÍSES DE LENGUA CASTELLANA

PORCENTAJES

Comenzamos sin salir de nuestras fronteras, cada año el I.N.E (Instituto Nacional de Estadística) publica cada año un estudio con los nombres y apellidos más frecuentes el año anterior, saliendo éste los del año 2021. Como dato, España tiene más de 100.000 apellidos diferentes recogidos en estas listas.

Os presento la gráfica con los apellidos más comunes a nivel nacional y el porcentaje de las mismas:

CIFRAS EXACTAS DE LOS 17 APELLIDOS MÁS COMUNES

1.  García - 1.462.696  

2.  Rodríguez - 930.659

3.  González - 927.819 

4.   Fernández - 910.545  

5.    López - 871.745

6.   Martínez - 833.665

7.   Sánchez - 818.322  

8.   Pérez - 779.666

9.   Gómez - 492.977

10.  Martín - 485.649  

11.  Jiménez - 396.237

12.  Hernández - 368.259

13.  Ruiz - 367.446

14.  Díaz - 342.548  

15.  Moreno - 321.848

16.  Muñoz - 282.983

17.  Álvarez - 281.024

EL APELLIDO MÁS COMÚN EN CADA PROVINCIA DE ESPAÑA

LOS APELLIDOS LATINOAMERICANOS MÁS FAMOSOS

 6. CURIOSIDADES DE LOS APELLIDOS A NIVEL MUNDIAL

- Aunque en España sea común tener dos apellidos, uno del padre y otro de la madre (hace años que no tienen porqué ir en este orden concreto, pudiéndose intercambiar), lo normal a nivel Mundial es que las personas sólo hereden exclusivamente el apellido paterno. En Estados Unidos, por ejemplo, tienen dos nombres y un solo apellido, el primero de los nombres se escribe tal cual, mientras el segundo suele ir representado con la inicial del mismo seguida de un punto. Esto ha dado lugar a muchos errores con gente latina que conserva sus dos apellidos y tienen que hacer algún registro incluso de nacionalidad en USA, ya que piensan que el primero de los apellidos es su segundo nombre, así que el paterno suele ir representado con la inicial seguida del punto y ponen el materno como único apellido original.

- El primer lugar donde se usaron apellidos hace más de 5.000 años, como no, fue China con la peculiaridad que la palabra apellido (姓) está conformado de los símbolos "女" (mujer) y "生"(nacer), en ese momento existía un matriarcado, muchos bebés nacían sin conocer a sus padres y heredaban el apellido de la madre.

- En Islandia el apellido es patronímico, es decir recogen directamente el nombre del padre de la criatura y le añaden el sufijo -son (hijo de) o -dóttir (hija de), de esta forma los apellidos no se transmiten de generación en generación, se crea uno nuevo de cada padre y a su vez un hermano y una hermana tienen diferente apellido. Como curiosidad, son "raros"  hasta la hora de elegir nombre, tardan tres meses desde su nacimiento en darle uno porque piensan que en este tiempo ha adquirido cierta personalidad y con ello un nombre adecuado.

- Algo parecido en la distinción de sexos sucede en países como Rusia, Bulgaria, Polonia, Grecia y República Checa. Los primeros de esta lista de países fueron los primeros en usar este tipo de regla (Putin/Putina o Tursunov/Tursunova) que hace que muchos hermanos no tengan exactamente el mismo apellido a ser hombres y mujeres. Los rusos además suelen contar con dos nombres, siendo el segundo una especie de apellido patronímico que sig añadiendo -ovich en masculino y -yevna, -ovna e -ichna

- Entre las dos Coreas apenas suman 280 apellidos diferentes de los cuales un tercio de todos ellos corresponden a tres: Kim (10 millones de coreanos tienen este apellido), Lee y Park. La razón es la siguiente: "Durante gran parte de la historia de Corea, solo la elite tenía apellidos. Esa elite tendía a adoptar apellidos que harían plausible afirmar que tenían antepasados procedentes de China, el país al que los coreanos más admiraban. Existían solo algunos de esos apellidos. Así que, cuando los plebeyos comenzaron a adquirir apellidos siglos más tarde, tomaron alguno de estos para disfrutar del prestigio de las familias que ya usaban ese apellido. La aristocracia coreana se conformaba de muy pocas familias, por lo que la variedad de apellidos de prestigio fue muy limitada".

- En Vietnam, el 90% de la población es acaparada por 14 apellidos, siendo el 40% Nguyen, apellido que deriva del chino y significa Ruan.

- En contra de la poca variedad de apellidos de Vietnam, se encuentra Tailandia donde ninguna familia tiene el mismo apellido, siendo estos totalmente exclusivos y no pudiendo haber dos familias que lo compartan tras una ley aprobada en 1963.

- En Holanda hasta el s.XVIII no existían, fue Napoleón tras invadir el país quien obligó a la población a crearse uno propio porque era la única manera de poder recaudar impuestos. Fruto del irónico humor neerlandes y de la desdicha vivida en esa época nacieron apellidos tales como: Uiekruier (llora por las cebollas), Poepjes (pequeña mierda), Rotmensen (gente podrida), Zondervan (sin apellido), Piest (mear), Zonderkop (sin cabeza), Gekkehuis (casa de locos), Niemantsverdriet (problema de nadie) o Hoogenboezem (senos elevados), que siguen subsistiendo hoy en día por culpa de la herencia generativa.

- Los brasileños suelen tener dos nombres y dos apellidos, siendo el materno el primero de ellos. Ahora bien, no suelen utilizarlos y se dan a conocer por sus apodos o sobrenombres. Esto puede deberse a la herencia de la esclavitud, donde los patrones ignoraban el nombre de sus siervos y solían referirse a ellos de esta forma y otros historiadores se aferran a la idea que es una manera de tener más cercanía con su entorno en el trato diario.

LOS APELLIDOS MÁS COMUNES EN EUROPA