SUPERCOPA DE EUROPA: REAL MADRID 2-0 SEVILLA

La verdad es que tenía muy malas sensaciones tanto en este partido como los dos próximos de la Supercopa de España ante el Atlético de Madrid.

En la última semana se hablaba mucho de la Supercopa de Europa hablando en demasía del equipo blanco y olvidándose del Sevilla, actual campeón de la Uefa.

Los andaluces venían mas rodados, siete partidos en pretemporada frente a tres donde jugaron más minutos los chavales que la mayoría de los de la primera plantilla, muchos de ellos aun de vacaciones. También se obvió que si bien en la gira al Madrid le llegaron poco a puerta, los goles vinieron en desbarajustes incomprensibles que provocaron entre otras cosas dejar en evidencia a un Casillas que seguía sin estar en los partidos creando unas grandes dudas ante su persona.

La marcha de Diego López y la contratación de Keylor Navas, hicieron también que se crease un ambiente de controversia y muchos ojos apuntando a la actuación que pudiera tener el cancerbero de Móstoles en este partido, esperando cargar las iras ante todo lo sucedido.

Si sumamos eso al deleite que puede ser el mediocampo juntando a Kroos con Modric, el alemán ha dado un recital de futbol en este partido, podemos llegar a la conclusión que el Madrid va a mejorar en la circulación de balón este año y los tres de arriba lo van a agradecer y mucho, pero no tanto la defensa. Me explico, ambos son grandes centrocampistas que en su día fueron mediapuntas, algo que ya te hace suponer que no son virtuosos en el tema defensivo, y puede que la zaga se resienta en varios partidos si no hay un tercer jugador en el centro que de una consistencia ante equipos que nos jueguen de tu a tu. Si hay espacios, hay mas jugadas del contrario que se pueden finalizar, y si esto ocurre, más fácil que te metan un gol si tu portero está lejos de su mejor momento.

También se ponía poner en duda cómo podían estar la BBC, sin dudar el estado de forma de Gareth Bale, impresionante en esta pretemporada, el tendón rotuliano de Cristiano y un Benzema con una sobrecarga en los últimos cuatro días que en algunos medios le ponían de duda o entre algodones para no prolongar a una lesión de carácter más serio.

He dejado para el final al fichaje estrella, más que nada por el dinero pagado y ser el máximo goleador del Mundial. James Rodríguez tampoco había jugado ni un minuto está pretemporada, viniendo de vacaciones escasemente hace 10 días y con una función que no se si es la mejor para él. Su juego hace que pueda brillar de mediapunta, e incluso de interior, siempre y cuando haya 4 jugadores en el mediocampo, pero si son sólo tres y ninguno de ellos especialista en destruir,  a James, si no le salen las cosas ofensivamente en el partido puede patinar y mucho, más si cabe porque el no va a ser el encargado de mover al equipo (Kroos y Modric), ni la referencia arriba (BBC) y eso se nota.

Centrándonos en el partido el Sevilla se preocupó en cerrar bien las líneas con la salida del balón de Denis Suarez, acompañado en labores ofensivas por Vidal o Vitolo, según se terciase y Bacca arriba. Organizados atrás procurando más el dejar su portería a cero que de marcar. El Madrid tenía el balón y la mayoría del tiempo el balón rodó en el campo de los andaluces.

Kroos se hizo amo y señor de la media, y el equipo no dudó en entregarle esos galones, no defraudó 73 de 77 pases buenos y once kilómetros setecientos metros, demuestran el pulmón que es, un único lunar fue su tarjeta amarilla que adolece que él no es un especialista defensivo, por mucha entrega que tenga y ganas que le ponga.

Las oportunidades llegaban y a Cristiano y Bale se les veía rápidos y verticales, parados a base de faltas, algunas pitadas y otras no por estar dentro de la legalidad (cargas) o concretando a base de remates que, sin ser peligrosos, iban a puerta.  La más clara fue en el minuto 26, Kroos para Benzema, el galo abre al segundo palo y Cristiano solo ante Beto, no pica la pelota y el portero, rápido en reflejos se tira rápido para enviar el chut a córner.

Poco después con un Madrid volcado en el ataque con jugadas que te hacen levantar del asiento, pendientes de cómo pueden acabar, vimos a Bale cabalgar por la banda de Cristiano, poniendo un centro a su banda, por donde aparecía el luso y está vez no perdonó fusilando a su compatriota y compañero en la selección. 1-0 y la sensación de superioridad de los blancos, un poco más acorde con lo sucedido en el campo y a su vez con el pensamiento que si no aprovechaban esos minutos, quizás podían pagarla caro.

De hecho los sevillanos tuvieron un par de ocasiones tras el gol con cierto descontrol  y fallos inconcebibles en la defensa blanca que no supieron aprovechar.

Hubo otra para los blancos con un centro desde la izquierda al segundo palo donde Bale conseguía rematar de espuela y de nuevo Beto desbarataba tan buena jugada de una perfecta conclusión. Pasaron los minutos sin ocasiones tan claras, pero con dominio del Madrid.

Al empezar la segunda parte, de nuevo Cristiano apareció para meter el segundo tras un soberbio chut, tras otra jugada entre Kroos, Benzema y la explosividad del luso, muy fino tras su grave lesión.

Una oportunidad de James digna de recordar y un par de paradas de Casillas, no de mérito pero si importantes para darle una confianza que parecía perdida. Se fueron sucediendo los cambios Iago por Vidal, Isco por un cansado James, Reyes por Denis Suarez buscando más mordida en ataque… Marcelo por Coentrao que se marchó con mala cara, tras un aseado partido, Coke lesionado fue sustituido por Diogo e Illarra por Modric para mantener el resultado favorable.

Los últimos minutos fue una volcada en ataque de los sevillanos, si bien fue todo más de corazón que de intimidación porque los blancos no pasaron problema alguno en defensa. Dejando acabar  el partido sin alteraciones y con cierto sabor de despedida de Alberto Moreno (Liverpool) y Di Maria (PSG a falta que se concrete algún gran traspasao en el club galo por culpa del fair play financiero).

Primer título de la temporada levantado con autoridad, sin dejar en esta ocasión dudas,  veremos qué pasa de aquí a una semana con un rival más duro como es el Atlético.