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10 abril 2017

¡QUÉ BIEN TE SIENTA LA CHAQUETA VERDE, SERGIO!

El 22 de marzo de 1934 se inauguró el que probablemente sea el más importante torneo de golf de toda la historia, el Masters de Augusta (Georgia, Estados unidos).

Este torneo es considerado uno de los cuatro Majors (Grandes) anuales:

1) Masters de Augusta (Segunda semana de abril)

2) Abierto de los Estados Unidos, sin sede fija (Fin de semana del tercer domingo de junio)

3) Abierto Británico de golf, sin sede fija, organizado por "The Royal and Ancient Golf Club de St. Andrews" (Fin de semana del tercer viernes de julio)

4) Campeonato de la PGA, sin sede fija en Estados Unidos  (Cuarto fin de semana después del Open Británico)

En los Majors se reúnen los más importantes jugadores de golf del momento, cosa que suele suceder únicamente en otros dos torneos de carácter bienal "La Copa Ryder" y "La Copa de Presidentes" y su reputación anual suele ir ligada a lo que demuestren en los mismos.

El Masters de Augusta es el único con sede fija y con el que a partir de su creación  y el auge del golf en las décadas de los 40-50, se termina de crear  el grupo de los Majors.

Como curiosidad también decir que es el segundo campo más jugado en la vida de los grandes golfistas, siendo el primero el lugar donde residen y entrenan. Esto tiene cierta lógica si estás en la élite del golf y sueles ir invitado a los Majors participando anualmente, pues en los otros cambias de campo cada año.

Ganar dicho torneo te da una serie de privilegios, como ganar la invitación vitalicia a este Masters y la de los otros Majors en el próximo lustro, pero el premio más significativo de este torneo quizás no sea ese, ni el económico, sino una chaqueta verde que te hace automáticamente ser socio del club y que tu nombre sea grabado en el Trofeo de Maestros.

Sus reglas son bien sencillas, es un campo de 18 hoyos con un recorrido de 72 golpes (4 por hoyo), a realizar completo durante cuatro días.


Tan sencillo y tan difícil a la vez, tan sólo Jack Nicklaus ha portado 6 veces la chaqueta verde y esta gesta le costó 23 años, le siguen Arnold Palmer y Tiger Woods con 4 chaquetas completando el podio en el que muchos reputados golfistas no llegaron a ser tan grandes históricamente por no repetir más chaquetas verdes.

A los españoles no nos ha ido tan mal en el mejor torneo de golf del mundo, teníamos la gran suerte de tener 4 chaquetas en total: 2 del gran Severiano Ballesteros (1980 y 1983) y 2 de José María Olazábal  (1994 y 1999) y quizás esta quinta chaqueta conseguida dieciocho años después tenía que estar de alguna forma ligada a estos dos golfistas.

Sergio García (9 de enero de 1980, Borriol, Castellón) curiosamente se hizo profesional y participó en este torneo en el año en  que Olazábal conseguía el último Trofeo de Augusta (1999) y consigue la chaqueta verde justamente el día en que Severiano Ballesteros hubiera cumplido 60 años.

Inicios de Sergio junto a Seve Ballesteros
Cosas del destino, un hombre que de joven prometía comerse el mundo y ha tenido que esperar a su madurez para conseguir su mayor éxito. No quiere decir con eso que durante el camino no haya conseguido nada:  9 PGA Tours, ninguno de ellos Majors entre el 2001 y el 2016; 13 Europeans Tours entre 1999 y 2017 y 5 Asians Tours entre el 2002 y el 2015 le avalan su reputada carrera.
Siempre ha sido uno de los mejores golfistas de la actualidad a la hora de las distancias largas, pero quizás la presión le podía en los torneos grandes en las cortas. Todos los golpes que era capaz de ahorrarse metiendo la bola dentro del green, los fallaba con putts de más con respecto a sus rivales dentro de este.

Curiosamente esto mismo le suele ocurrir a Jon Rahm, nuestra gran esperanza de cara al presente-futuro en el golf español, con el handicap que este Masters lo ha jugado enfermo, una lástima tras el buen 2017 que se está marcando con el título PGA del Abierto de San Diego incluido.

Y ahí estaban ambas esperanzas para este Masters de Augusta este año,  un joven con ganas de comerse el mundo y otro con más de media vida jugando el torneo, en uno de sus mejores momentos de forma.  Las esperanzas se multiplicaban cuando el número 1 mundial el estadounidense Dustin Johnson era a última hora baja al caerse por las escaleras de su casa de alquiler en el torneo.

Tras la primera jornada, Sergio García se colocaba 4º con 71 golpes (-1), a 6 golpes del líder Charlie Hoffman  65 golpes (-7). Rahm se tenía que conformar con la decimonovena plaza con 73 golpes (+1) a 8 de la cabeza.


En la segunda jornada, Hoffman pinchaba con 75 golpes, para un total de 140 (-4) y Sergio García se colocaba colider con los mismos golpes 140, después de firmar en 69 la segunda ronda.  Rahm también había mejorado con respecto al día anterior cerrando con 70 golpes para un total de 143 (-1), siendo con otros tantos séptimo en la clasificación a 3 golpes de los líderes.


En la tercera jornada, un gran día de Justin Rose, campeón Olímpico, con 67 golpes, le alzaba al liderato  con un total de 210 golpes (-6), con Sergio García aguantando de nuevo el tirón y siendo colider con los mismos golpes que Rose tras firmar 70 en esta tercera vuelta. Rahm tuvo dos grandes errores  en el hoyo 4 y el 17, acabando la jornada con 73 golpes para un total de 216 (0) siendo undécimo en la clasificación, muy alejado de la chaqueta.


La cuarta y decisiva jornada fue una épica batalla entre Rose y Sergio, demasiados toma y dacas, hasta el mal trago del hoyo 16, cuando clavamos una rodilla porque Rose se marchaba a falta de dos hoyos. En el hoyo 15 Sergio había hecho una gran proeza para estar ahí y el 16 se lo quitaba de nuevo. Quiso la suerte que en el 17 un bogey del estadounidense nos metiera de nuevo en la puja por el título con una ligera desventaja que se igualó en el hoyo 18. Sergio tenía en su haber el tiro definitivo un putt que si entraba le daba la ansiada victoria y que si lo fallaba le mandaba a jugársela a otro desempate. Esta vez el tiro no le hizo una corbata y la bola quiso entrar, acabando con 69 golpes y 279 en total (-9), olvidando el recordado Open del 2007 en Carnoustie en el que en la misma situación Sergio falló y perdió en el desempate ante el irlandés Harrington.



Quizás Seve quiso estar ahí, ayudándole para recibir un regalo en su cumpleaños... Sólo se que con este Masters de Augusta se ha hecho justicia a la carrera de Sergio García, que dejó de ser "El niño" hace años y al que el golf le debía un grande.


Otra grandeza que hemos conseguido con esta victoria es ser el segundo país en el mundo con más chaquetas verdes tras los Estadounidenses, esta quinta, aunque muchos no sigamos este deporte, es hito en la historia de los nuestros, uno de los mayores a los que un golfista puede aspirar...
Esta victoria también le aupa al séptimo puesto de la clasificación mundial, a expensas de poder mejorarlo en sucesivos torneos, ya que se encuentra  como he dicho antes en un gran momento de forma. 

Muchas felicidades Sergio, te lo mereces.

2 comentarios :

  1. Buenos días amigo, sinceramente no sé casi nada de este deporte y me ha parecido un post curioso. Me alegro por el triunfo y que le sigan muchos más. Un abrazo

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    1. Sinceramente Sara, yo tampoco, pero siempre que hemos conseguido algo grande en algún deporte lo he querido reflejar en mi blog para recordarlo y homenajearlo. Es según dicen el mejor trofeo que puede ganar un jugador de golf a nivel individual... Otro de vuelta.

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