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16 enero 2017

DESTAPANDO EL BLUE MONDAY

¿Qué narices es esto del "blue monday"? se preguntará mucha gente... Yo lo descubrí por casualidad el año pasado y me resultó sumamente curioso por muchas cosas que me apetecen destripar.

Todo esto empieza por un estudio totalmente ajeno con el resultado final. En el 2004, una agencia de vuelos con varias sedes a nivel mundial llamada "Sky Travel", pidió un estudio sobre sus potenciales clientes y cuáles eran las fechas propicias para ellos a la hora de volar.

La empresa a la que se le encargó dicho estudio, cuyo nombre no he conseguido encontrar por ninguna parte, se pone en contacto con Cliff Arnall, un científico  que trabaja como profesor en el "Centre for Lifelong Learning" y, en esos momentos, también como adjunto a la Universidad de Cardiff.

Arnall se pone manos a la obra con su trabajo y en su informe también intenta crear una ecuación que muestre lo contrario, saber cuando las personas somos más reacias a viajar en avión, utilizando los baremos que influyen en contra de un viaje.

Para ello puso en un dividendo una multiplicación de "los tiempos gastados" donde C hace referencia a tiempo gastado en cultura, R hace referencia al tiempo gastado en relax y ZZ en tiempo gastado durmiendo.

Y en el divisor colocó los motivos en contra cuando decides viajar en avión donde sumó el tiempo total de viaje (Tt) más los posibles retrasos (D) multiplicándolos por el estrés que esto suponía (S). A esta operación le suma el tiempo que cuesta preparar el equipaje (P) multiplicado por el tiempo que cuesta preparar todo el viaje, es decir, decidir destino, buscar lugar de residencia, transporte y demás (Pr).


Lo que no sabemos muy bien porqué, puesto que el señor Arnall y Sky Travel no lo han revelado, el resultado de toda la operación anterior debe ser mayor a 400. Pero si sabemos que si es igual o menor a ese número, la gente no concibe que viajar sea propicio, puesto que si el dividendo no es excesivamente grande (ganas de cultura, tiempo de relax y tiempo que puedes gastar en descansar), por muy pequeño que sea el divisor (inconvenientes del viaje) saldrá menos que esos cuatrocientos...

Sigo analizando dicha ecuación, si en el dividendo obvias las ganas de cultura (o de conocer lugares, viajar en sí...), nos estamos centrando que para que ese número sea exageradamente grande, debemos disponer de dinero (para poder abastecer ese tiempo de relax) y de vacaciones (tiempo de descanso). Y rizando el rizo, si queremos viajar y disponemos de dinero, el óbice residirá en el cuándo podemos hacerlo (las vacaciones).

Esto me parece importante para explicar después el Blue Monday.

Si has llegado hasta aquí y me has comprendido, te felicito, pues no es fácil hacer entender una ecuación cuyo propósito es saber cuando las personas son menos propicias al elegir viajes en avión y llegados a este punto, nos centramos en el "Blue Monday".

Cliff Arnall dilucidó a través de su ecuación y los números de viajes proporcionados por Sky Travel  que la gente cuando menos viaja es en Enero, pasadas las vacaciones de navidad, y que el día menos propicio era un lunes.

También me apetece destripar un poco esto, algunas veces los resultados de una ecuación son meramente lógicos. Tras las navidades la gente se incorpora al trabajo o estudios, se ha gastado mucho dinero más que en cualquier otro mes en comidas, regalos, viajes para reencontrarse con los familiares o celebrarlas en un lugar donde les apetecía. Enero es uno de los meses más fríos  en Europa, pues estamos en invierno... Por ende, si no disponemos del dinero, porque hace días nos lo hemos gastado, si no disponemos de vacaciones, pues volvemos de ellas y nuestro nivel de visitar lugares también baja por el clima... ¡Igual es lógico que sea una etapa muy baja a la hora de subirte en un avión!, porque generalmente en estas fechas, es la gente pudiente que tiene horario flexible en su trabajo o jubilados que aprovechan las ofertas de vuelos, que se deben hacer aun estando vacios y hacen promociones para por lo menos no perder en gasoil...

Fue en enero del 2005, cuando la  reportera de "NBC news" de Londres, Jennifer Carlile, se hizo eco del estudio de Arnall y la lió aún mas parda, pues al comentarlo dijo que el lunes 24 de enero, era "el día más deprimente de todo el año". Y si lectores, me he retasado lo suyo, pero con este artículo nació el "Blue Monday".

Las conclusiones que se sacaron de ese artículo fueron varias:

1) Que Cliff Arnall había descubierto que "el tercer lunes de Enero" (fecha indeterminada, pues también puede coincidir que sea el segundo o el cuarto dependiendo del calendario), era el día más deprimente de todo el año.

2) Que la gente se siente especialmente alicaída por las muchas variables que tienen en contra: han vuelto de vacaciones, no tienen dinero, no tienen ganas de viajar, hace frio...

3) Definir dicho día como "Blue Monday" (Lunes azul, dándole ha dicho color la propiedad de la tristeza). Y vendiéndonos una parafernalia que un estudio científico nos demuestra que ese día todo el mundo es proclive a estar mucho más triste. Obviando que Europa no es todo el mundo y que mientras aquí es invierno, en otras partes del planeta es verano y mucha gente estará en una playa disfrutando y no malhumorado porque hoy le toca el "Blue Monday".

4) La reportera cambió la fórmula de Cliff, sin saber muy bien de dónde saco la nueva.


Esta nueva ecuación la desglosó en 7 variables : Donde la W es el tiempo atmosférico que sumado al salario (D) menos la deuda o gastos (d) y multiplicado todo ello por el tiempo real dentro de las vacaciones que dispones en navidad (TQ), lo dividimos entre las bajas ganas de motivación (M) y las necesidad de tomar medidas (Na), nos da como resultado el Blue Monday.

Los neurocientíficos del Reino Unido enseguida saltaron a la yugular de esta ecuación, diciendo que como tal era un sinsentido porque a través de ella no se podría sacar nunca el peor día del año y, en caso que hubiese una ecuación para sacar dicho resultado, debería tener cientos de variables que se omiten.
 
El más crítico fue Benjamin Michael "Ben" Goldacre, médico académico, divulgador de ciencia y escritor de los libros "Mala ciencia" y "Mala farma", donde se dedica a explicarnos los fallos de cosas como esta, para no crear dudas, crítico ambas ecuaciones, la original y la inventada sensacionalista diciendo de ellas que:  "fallan incluso para tener sentido matemático en sus propios términos", señalando que "se puede tener un buen fin de semana quedando en casa y reduciendo tu tiempo de viaje a cero".

Con el paso de los años, parece que había que darle más propaganda a este invento del peor día del año y, que pese a que siguen nombrando al "prestigioso científico" Cliff Arnall, la verdad es que la mayoría de los artículos tergiversan todo lo que les he comentado y a día de hoy hasta le han cambiado la fórmula y el origen.

A día de hoy el típico artículo que busca visitas, te anuncia que Cliff Arnall fue contratado para buscar el "Blue Monday"  y saber cuál es el día más triste del año y creó la segunda fórmula. A eso le añaden típicas acciones de sugestión, en plan, seguro que lo has notado... Y si hoy en verdad te ha ocurrido algo malo, o estás triste por alguna cosa, tiendes a creértelo más.

El pobre Arnall siempre se ha desmarcado del Blue Monday y nos habla que él fue contratado por una empresa de aerolíneas para un estudio de campo del porqué y cuándo las personas viajamos más y menos en avión...

Y con esto quiero ser una de las tantas personas que informan de este bulo, de los tantos que hay por internet, en lo que se busca visitas a través de una noticia a la que dan cierto rigor, en este caso científico y que a costa de tanta fama y visitas, terminamos creyendo como real.

De paso espero que hoy haya sido un buen día para todo el mundo y, si ha sido malo, no os preocupéis que científicamente el año que viene por estas fechas, no está probado que vaya a ser así.


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