▲ Cerrar ▲

27 febrero 2014

SOBRE PACO DE LUCÍA…

Francisco Sánchez Gómez, hijo de Lucía Gomes “La Portuguesa”, nació en Algeciras, Cádiz el 21 de diciembre de 1947 y lo hizo con arte en sus entrañas. Desde pequeño, su padre se preocupó por meterle muchas horas de improvisación con la guitarra, al igual a que su hermano Ramón, también guitarra de profesión y que ayudaba a su hermano menor a aprender. Otro hermano suyo también se hizo cantaor flamenco, así que con una familia tan llena de artistas, ya se veía venir lo que iba a ser su profesión.

Su nombre artístico “Paco de Lucía”, viene de tan sencilla explicación, en su barrio había muchos “Pacos y Pepes” y de alguna forma les debían diferenciar, y a él le reconocían gracias a su madre.

A finales de los 60 conoce a su gran amigo Camarón y se quedan prendados uno del otro, uno ansiaba la voz del otro y el otro la forma de tocar del uno… Así que deciden consolidarse como dueto inseparable y se ganan la fama a través de 10 discos entre el 68 y 77. A partir de ahí el resto es historia, tanto juntos como separados se convirtieron en los símbolos del flamenco y de la guitarra española.

Poco a poco se hace ilustre contribuyendo a un reconocimiento internacional de la guitarra española, tocando varios géneros, sin olvidar nunca sus raíces de flamenco: Entre dos aguas (rumba), La Barrosa (alegrías), Barrio la Viña, Homenaje al Niño Ricardo (soleá), Almoraima (bulerías), Guajiras de Lucía y Río Ancho (rumba). Además se atreve a innovar introduciendo un instrumento que descubre en una de sus giras por Perú: El cajón, tan imprescindible a día de hoy en cualquier tablao flamenco.

Es curioso que una persona que nunca habrá leído una línea de un pentagrama supiese tocar la guitarra con más arte que virtuosos criados en conservatorio, pero como él decía: “que no sepa decirte que es lo que toco, no significa que cuando suba al escenario no te haga sentir magia”. Siempre fue muy suyo… tanto que decía que si por él fuera no iría a trabajar, que no haría giras, pero la gente iba a su casa y se lo llevaba a todas partes para tocar… eso dice su gran categoría en el arte de las 6 cuerdas: "Yo no necesito nada, estaría todo el día echado. Soy el más indolente del mundo. Lo que pasa es que entro en la rutina y tengo compromisos, hago giras, más que ir yo, me llevan"

Muchos le recuerdan por “Entre dos aguas”, pero para mí, con todos mis respetos, su obra cumbre fue en 1991 con el Concierto de Aranjuez, mano a mano con el maestro Rodrigo, y una filarmónica de acompañamiento o interpretando obras de Manuel de Falla. 

Semiretirado hace años en Tulum (México) solía disfrutar de sus hijos y nietos, dando conciertos de vez en cuando para no olvidar viejas costumbres y recibiendo galardones nivel mundial como el nombramiento de Doctor Honoris Causa de Música por el Berklee College of Music of Boston en el 2010,  el martes nos dejó por un infarto, con 66 años de edad, no sin ello haber vivido como él quiso, gracias a su arte, pasando a la historia como una de las mejores (por no decir alguno el mejor) guitarras españolas de todos los tiempos y sirviendo de inspiración a cualquiera que haya tocado una de ellas… Gracias maestro, D.E.P

No hay comentarios :

Publicar un comentario