La evolución del ser humano no se quedó estancada al
llegar a la cúspide de los animales que habitan La Tierra, siguió buscando
llegar a la mayor perfección posible dentro de nuestras limitaciones.
En este post vamos a hablar de un tema tan
controvertido como el debate entre la evolución natural y el querer saltarse
pasos haciendo que esta se produzca a través de otros medios.
Creo que la mayoría de gente de este mundo quiere
vivir más años y tener mejor calidad de vida que sus antepasados y a su vez que
sus descendientes sean más inteligentes, más guapos, más fuertes y mejor
preparados para lo que les espera en esta vida.
Ni que decir tiene que si nacemos con un problema
congénito o este se produce por accidente a lo largo de nuestra vida, todos los
que están a nuestro alrededor harán lo posible en invertir para que ese mal
tenga el menor impacto posible en la calidad de ésta el tiempo que nos quede.
Ahora bien, de esas premisas a llevar la cosa al extremo,
no sé hasta qué punto es lícito y si el ser humano debe jugar a ser dios,
porque los resultados a este experimento a lo largo de la historia han
resultado infructuosos e incluso dañinos pues la biología natural funciona por
derroteros muy diferentes a la experimental, quizás por ello, tocando de
refilón el caso, no se entiende hoy en día la clonación humana y no está tan
bien visto el hecho de crear la mejor raza humana de la historia, de la misma
forma que se aplaudió el avance científico con la oveja Dolly o en la
alteración genética de especies, como crear perros o gallos de pelea a través emparejar
forzosamente a diferentes razas, cambiar el color de piel a las serpientes para
que sean más llamativas y la gente las compre o crear productos para sanidad o
belleza a partir de experimentos con animales.

La evolución del ser humano no se quedó estancada al
llegar a la cúspide de los animales que habitan La Tierra, siguió buscando
llegar a la mayor perfección posible dentro de nuestras limitaciones.
En este post vamos a hablar de un tema tan
controvertido como el debate entre la evolución natural y el querer saltarse
pasos haciendo que esta se produzca a través de otros medios.
Creo que la mayoría de gente de este mundo quiere
vivir más años y tener mejor calidad de vida que sus antepasados y a su vez que
sus descendientes sean más inteligentes, más guapos, más fuertes y mejor
preparados para lo que les espera en esta vida.
Ni que decir tiene que si nacemos con un problema
congénito o este se produce por accidente a lo largo de nuestra vida, todos los
que están a nuestro alrededor harán lo posible en invertir para que ese mal
tenga el menor impacto posible en la calidad de ésta el tiempo que nos quede.
Ahora bien, de esas premisas a llevar la cosa al extremo,
no sé hasta qué punto es lícito y si el ser humano debe jugar a ser dios,
porque los resultados a este experimento a lo largo de la historia han
resultado infructuosos e incluso dañinos pues la biología natural funciona por
derroteros muy diferentes a la experimental, quizás por ello, tocando de
refilón el caso, no se entiende hoy en día la clonación humana y no está tan
bien visto el hecho de crear la mejor raza humana de la historia, de la misma
forma que se aplaudió el avance científico con la oveja Dolly o en la
alteración genética de especies, como crear perros o gallos de pelea a través emparejar
forzosamente a diferentes razas, cambiar el color de piel a las serpientes para
que sean más llamativas y la gente las compre o crear productos para sanidad o
belleza a partir de experimentos con animales.